Los líquenes son organismos fascinantes, son un grupo de hongos que viven en simbiosis con algas verdes y/o cianobacterias, y por eso forman parte de los productores primarios en los ecosistemas donde viven. Esta estrecha relación es tan exitosa que se han expandido por toda la superficie terrestre, llegando a ser de los pocos seres vivos macroscópicos en ocupar ambientes extremos, como algunos sectores de la Antártida, el Ártico y la alta montaña. A pesar de esto, son muy sensibles a variaciones en la composición del aire, por lo que su uso como bioindicadores de contaminación atmosférica es muy difundido en el mundo. Por otro lado, producen sustancias muy particulares que son de uso potencial en diversas ramas de la medicina y las ciencias ambientales.

Los líquenes se clasifican dentro del Reino Fungi y se cree que existen alrededor de 20.000 especies. Algunos autores también han interpretado a los líquenes como un pequeño ecosistema y no solo como un organismo. Ya que en su interior pueden existir varios hongos, varias algas, además también organismos como bacterias, insectos, nematodes, moluscos, entre otros. Sin embargo se comportan, viven y evolucionan como un solo organismo ¡fascinante!